Desde que comenzó el estado de alarma, Grupo Oblanca se ha preocupado por ayudar a los más que lo necesitan, colaborando estrechamente con el Banco de Alimentos de León para hacer llegar sus productos a las familias que más están sufriendo los efectos de la crisis.

Semanalmente, la empresa familiar leonesa está haciendo dos entregas de cajas de pollo, que posteriormente el Banco de Alimentos de León se encarga de repartir entre las familias más desfavorecidas de la zona.

A través de esta iniciativa, Grupo Oblanca ya ha donado casi 800 kilos de este producto, cantidad que se verá incrementada en las próximas semanas con nuevas aportaciones.

En todos estos días, la compañía ha continuado con su actividad para garantizar el suministro de productos avícolas, básicos en la cesta de la compra del consumidor, y los trabajadores de las áreas de producción y logística han seguido acudiendo a trabajar por turnos a las instalaciones.

Para ello  la empresa ha implementado un protocolo de actuación con una serie de medidas para proteger a sus empleados y a los consumidores, entre las que figura el envío por parte de su Departamento de Recursos Humanos a todos los trabajadores de una guía de actuación en el ámbito laboral en relación al nuevo virus, infografía sobre el correcto lavado de manos, y preguntas y respuestas sobre el coronavirus.

Para que pueda ser consultada en cualquier momento por los trabajadores, esta guía también está disponible en formato papel en las instalaciones de la empresa, donde también se ha colocado diversa cartelería con recomendaciones sanitarias, dosificadores de desinfectante en todas las zonas de tránsito o lugares donde haya personal de la empresa y cajas de pañuelos desechables.

Además,  la empresa también ha proporcionado a los repartidores un desinfectante por persona para que lo puedan llevar en su vehículo y ha implantado controles sobre el estado de todo el personal que entra a las instalaciones.