Los empresarios familiares de Castilla y León mejoran sus proyecciones económicas para este ejercicio y más del 98 por ciento prevé mantener o incrementar la facturación y el empleo en 2018, lo que supone un aumento de cuatro puntos respecto a las estimaciones del año anterior.
De hecho, el 97 por ciento de los empresarios afirma que igualará o incrementará su cifra de negocio en 2018, frente al 95,7% del pasado año, y el cien por cien de los encuestados asegura que su plantilla se mantendrá o aumentará en este ejercicio, 6,5 puntos más que en 2017.
Así lo refleja el sondeo anual que Empresa Familiar de Castilla y León (EFCL) realiza a sus asociados, un total de 151 empresas familiares de la región líderes en sus respectivos sectores cuya facturación global equivale al 21 por ciento del PIB y dan empleo al 9 por ciento de la población ocupada de Castilla y León en el sector privado.
A pesar de estas optimistas previsiones, los empresarios familiares no modifican su visión sobre la situación económica nacional y regional, que obtienen prácticamente la misma valoración que el pasado año, un aprobado justo con 5,4 puntos y 5,1 puntos sobre 10, respectivamente.
Lo que sí suspende es la política económica promovida por el Gobierno regional, que obtiene una calificación de 3,9 sobre 10.
La capacidad de la clase política es la principal preocupación para el 82 por ciento de los encuestados, seguida muy de lejos por la situación en Cataluña (9 por ciento), la corrupción (6 por ciento) y el nivel actual paro (0 por ciento).
Por otra parte, el 64 por ciento de los empresarios se muestra partidario de eliminar el sistema autonómico de España, frente a un 24 por ciento que lo dirigiría hacia un sistema federal y el 12 por ciento que se muestra conforme con su configuración actual.
Al tiempo, aumenta la negativa percepción que tienen los empresarios de la burocracia como traba para el desarrollo de los negocios y así el 70 por ciento de los encuestados, tres puntos más que el año anterior, afirma que su empresa dedica más del 20% de su tiempo a cumplir con los trámites con las administraciones.
Respecto a la equiparación de salarios entre hombres y mujeres, el 91 por ciento de los empresarios familiares afirma que existe igualdad en su empresa en los sueldos en las mismas responsabilidades.
La formación es otro de los aspectos por los que los empresarios familiares muestran su preocupación en la encuesta y califican con un 5,6 la de los jóvenes que se han incorporado a sus empresas en los últimos años y con un 3 el grado en el que las Universidades responden a las necesidades de las empresas.
En este sentido, un 7,2 por ciento considera una prioridad la potenciación de la Formación Profesional Dual, plan formativo que el 57,6 por ciento afirma conocer.
Por último, y aunque aumenta ligeramente, sigue siendo negativa la valoración de la imagen que tiene la sociedad sobre el empresario, pasando de obtener 4,4 puntos el pasado año a 4,8 en este sondeo, y se mantiene estable en el caso del empresario familiar, que vuelve a obtener una calificación que roza los 6 puntos sobre 10.